El consumo de agua natural viene de lejos, una de las más famosas aguas
del país es la de Lanjarón. Un agua que empieza a cobrar fama en el
propio reino de Granada y es declarada minero-medicinal en 1818
Es un agua de débil mineralización, que se utilizan como régimen y van muy bien para la preparación de comidas infantiles.
Este tipo de agua beneficia a las personas con hipertensión arterial, problemas cardíacos y afecciones del rinón.
El agua natural es nítida, transparente y cristalina, sin olor anómalo. Es ligeramente ácida y presenta una delicada estructura según su contenido en minerales.Tiene un sabor ligeramente dulce, equilibrado en boca y refrescante.
Su perfíl organoléptico le permite compartir la mesa con vinos blancos jóvenes con aromas afrutados y herbales, así como con vinos rosados frescos.
Buen provecho.
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